En "Off-Rol"

Es curioso que aquí todas las estrellas sean de Oriente.
No te jode… ¡como que estoy en Oriente!
La diferencia con la famosa estrella de Belén es que esta voló por el cielo para pararse justo encima de un portal, mientras que aquellas otras, a pesar de que también vuelan, no suelen pararse.
Por eso no les quito el ojo de encima. Las hay que caen al suelo, haciendo temblar la tierra y el interior de uno mismo por el estallido que pegan.
Sí.
Aquí también es Navidad.
Al igual que allí, también lanzan petardos y cohetes en todas direcciones. Pero estos son más juerguistas que todos vosotros juntos.
¡Já!
Como que se pegan casi todo el año de Navidad los tíos. Cosa que no entiendo, pues bien que tanto Papa Noel (con Rudolf a la cabeza) como sus majestades reales Melchor, Gaspar y Baltasar dan un rodeo evitando este lugar.
Tan solo entran los camellos. Supongo que los campos de amapolas y el negocio del opio de este lugar tendrán que ver algo.
Vamos, digo yo. Que para eso son “camellos”.
Pero bueno, dejemos los gajes del oficio a un lado (haber estudiado más y haberme hecho controlador aéreo) y vayamos a lo principal que era…
¡Leches! ¿Qué era?
¡Ah, sí! Vosotros.
Vamos, vamos. No hace falta que salgáis corriendo, joder. Prometo no empezar con “me llena de orgullo y satisfacción…” ni ponerme con sentimentalismos vacuos ni nada de eso.
Además, seamos sinceros:
¿Acaso conozco a alguno de vosotros personalmente?
Pues no.
Con lo cual ¿deberían de importarme algo esos desconocidos que se camuflan bajo un nick en este foro o en aquella sala?
Pues tampoco.
Dicho esto, bien podría añadir que me la traéis al pairo, que me la “repanpimflan” vuestras opiniones y que me importáis un pimiento todos y cada uno de vosotros.
(Hum… pimientos…. Con huevos…. Y unos filetitos….babeo con solo pensarlo. No sabéis lo que se puede llegar a echar de menos unos huevos fritos…)
Podría decirlo, sí.
Pero no es así. Muestra de todo es las líneas que ya llevo escritas casi sin quererlo.
No seamos ceporros, amigos míos. No nos encerremos en la ya gastada y más que usada forma de pensar “a mí es que estas fiestas no me gustan” basada casi siempre en el deje de melancolía que desprenden estas fechas.
Cierto es que se han vuelto meramente consumistas (de hecho, y perdón por la no intencionada publicidad, quien determina el comienzo y fin de la Navidad no es el calendario, sino El Corte Inglés. Al igual que las otras épocas del año.)
Cierto es que son semanas meramente hipócritas, en las que el más avezado terrorista pone cara de santo mientras el ricachón de turno deja las monedas que le sobran en las manos de un mendigo. Y hasta el año que viene, que ya hemos cumplido.
Cierto es también que las penas son penas los 365 días del año (366 los bisiestos, claro) y que no habría que esperar a la Navidad para solucionar las desdichas o los errores personales.
Vale. Estamos de acuerdo en eso y en muchas cosas más.
Pero ya que la sociedad ha marcado la tendencia de intentar solucionar todo lo malo en estos días ¿por qué nos empeñamos a veces en bajarnos del carro por el simple hecho de llevar la contraria?
No me parece tan mala idea pulsar ese botón de RESET que llevamos en el cerebro y afrontar el siguiente año con optimismo renovado, con el corazón más limpio y abierto y con el estómago lleno de cubatas (o refrescos para el que conduzca o no les guste)

Porque eso os deseo a vosotros, a los que me importáis bien poco y a los que no conozco de nada:

Que tengáis una Feliz Navidad.
Que hagáis una buena entrada de año.
Que vuestros deseos, sueños e ilusiones se cumplan siempre arropados por aquellos que más queréis.
Que por cada lágrima derramada en este año que agoniza, sea un día completo de risas en el que se aproxima.
Que el 2011 sea todo un año de dicha y felicidad para cada uno de ustedes.

Menos mal que me importáis poco… (¬¬)

¿Qué quién soy yo para desearos nada?
Pues… ahora que lo pienso… nadie, la verdad.
No soy nadie.
Solo un desconocido que se esconde tras el nick de Masoj y que está a miles de kilómetros de su casa.
De su casa… y de todos vosotros.
Un fuerte abrazo.

De Christmas akhtar de bakhtawar au newai kal de mubarak sha
(En pasthún : Feliz Navidad y próspero Año Nuevo)