Un nuevo "Miembro"
Un nuevo "Miembro"
* Miika_Korppi se levó la mano al pecho, como si con ello pudiera controlar la respiración y los latidos. El encuentro en el Bella Nafil no había sido precisamente violento, pero había sido por sorpresa y la carrera posterior había terminado por llevarla a ese estado. La puerta de la cantina estaba entreabierta y no parecía que hubiera mucha gente, pediría algo de beber y descansaría antes de volver a la ciudad. Había mucha penumbra y los rayos polvorientos se colaban por la ventanuchas mostrando algunas mesas "habitadas" por marineros, no todos de buen proceder. Se acercó a la barra y pidió una pinta.
*Octav acaricia la cabeza de Set cuando se levanta al entrar alguien al establecimiento, pero no retira la vista de su vaso de vino que saborea chasqueando la lengua. Frente a él Sihir, que si que desvió su mirada hacia el nuevo visitante siguiéndolo hasta la barra, que segundos después volvió a mirar a su compañero de mesa. La capa de piel de leopardo colgada en la espalda de este inmenso hombre era algo llamativo en ese lugar.
* Miika_Korppi mientras espera, se gira para observar a la gente. Seguramente habría alguno de los tripulantes del Bella Nafil. Sin embargo no encontró a ninguno, mejor, si nadie sabía quién era evitaría preguntas incómodas. Por otra parte al grupo de Octav dedicó una mirada precavida, no le enfundaban confianza y creía saber quiénes eran. Aun así inclinó la cabeza a modo de saludo.
*Octav mira a esa persona que le saluda, no cree conocerla y de hacerlo, lo más seguro es que lo hubiera matado, le da un golpe a Sihir: -Quién es? *Le pregunta haciendo que su compañero se gire para comprobar que es la persona que él miraba antes, vuelve la vista hacia su capitán y responde: -Sasamagüe.. utoniwa güme. *Octav entrecierra los ojos dándole varias palmaditas a Set en el cuello que hacen que el animal se levante y camine hacia la persona que les saludo mordiéndo levemente sus pantalones y tirando de ellos hacia la mesa donde se encuentra su amo.
* Miika_Korppi se había vuelto a la barra para recoger la pinta cuando sintió que le tiraban del pantalón. Cuando vio al perro y que no pretendía hacer daño sonrió. Le gustaban, al fin y al cabo dependía de ellos para vivir en el frío ártico. Lo que no le gustó tanto era que lo llevaran a la mesa. Tenía que seguir el consejo del viejo Gustav, "que nadie sepa que existes".
-saludos, su perro..bueno, no sé qué quiere, espero no molestar. no pudo evitar inspeccionar la cicatriz y buscarle mil motivos y formas de cicatrización.
*Octav clava sus azules ojos en el interlocutor examinándolo, de igual modo lo hacía Sihir, que desde más cerca se podían distinguir los tatuajes de sus hombros. Octav se frotó la mejilla, percatándose de que examinaba su cicatriz: -¿Te gusta chico? *Sihir sigue con la mirada en el desconocido.
* Miika_Korppi bajó la mirada al perro, que era el único ser que no le daba miedo de aquella escena a pesar de los dientes que se le presumían. Simple curiosidad, me gustan las cicatrices *cerró los ojos, otra vez volvía a pronunciar un comentario poco acertado, levantó la vista y se topó con la imagen de Sihir, lo que hizo que expulsara el aire a trompicones. Por alguna razón terminaba en un problema en cuanto hablaba. Ahora pensaría que era un chico desviado. es decir...es por mi trabajo, intento curar a la gente y coso heridas, me fijé en la vuestra por esa razón.
*Octav chasquea la lengua y empuja una silla con su pie para que el desconocido se siente: -Seguramente que si te hiciera una podrías cosértela más rápido que yo mismo a ti. *Sihir le ofrece sentarse con un gesto de su mano que resulta lento, pero nada ofensivo: -Kala mapegu... *Dice mirando a Octav que le responde con una inquisitiva mirada como si lo que le dijo Sihir le hubiera ofendido. Set se coloca junto a su dueño.
*Miika_Korppi toma asiento dejando la pinta sobre la mesa. Se reclinó sobre el asiento, y pensó en sus posibilidades de sacar partido a aquella situación- Podéis estar seguro de eso señor, aunque espero no tener que demostrároslo, al menos en mi cuerpo.- no podía seguir mostrándose como un muchacho amedrantado, tenía que hacerse valer y quizá tuviera que cambiar algunas cosas en su forma de pensar.- Se a lo que se dedican. Ya estaba hecho, ahora solo restaba que le rebanaran el cuello o que escucharan sus palabras.
*Octav ríe suavemente, hasta esa risa suena grave, dedica unos segundos para mirar hacia otro lado y cuando borra de golpe su risita de su rostro clava de nuevo sus ojos en el interlocutor: -Y? ... más de medio puerto sabe a que me dedico... *Sihir esboza una amplia sonrisa dejando que sus blancos dientes contrasten con el extraño tono dorado de su piel, que no es un moreno clarito, pero tampoco oscuro.
-Pero ellos no os serían de utilidad como yo.- se había armado de valor para hablar de aquella forma y ahora le gustaba esa sensación. Se acercó para apoyarse sobre la mesa y así mirar directamente a Octav -Ahí si os puedo demostrar si soy veloz con la aguja y el tendón- volvió el rostro hacia el inmenso Sihir y sonrió de medio lado. Le costaba meterse en eso, pero sería la mejor manera que tendría para aprender.
*Octav enarca una ceja y agarra al muchacho por la pechera y lo acerca a él en un golpe seco, huele a mar. A pesar de notar algo extraño, se lo calla, quizá pueda jugar esa baza en otra ocasión: -No juegues conmigo porque soy un hombre de poca paciencia.. *Le susurra a medio palmo de su cara soltándolo de golpe esperando a ver que le ofrece.
* Miika_Korppi toma aire intentando que no sea de una forma alterada. Aun tiene el salitre de Octav colapsando su olfato. Vuelve a colocarse bien y toma de la pinta, más por tranquilizarse que por sed- De donde yo vengo, la paciencia es un arte a cultivar, pero me he dado cuenta de que aquí no se usa demasiado. No os defraudaré. Estoy seguro de que tendréis algún carnicero que os haga el trabajo, pero perdéis mucha mercancía. Mis métodos no son tan chapuceros y ganaríais más dinero. Unos órganos en buen estado es lo que se pide...- hablaba por deducción, no conocía a nadie que curara de forma decente. Si traficaban con órganos serían cuatro carniceros que poco sabrían de mantener en buen estado un órgano.
*Octav entrecierra los ojos y decide pronunciarse volviendo a acercarse al muchacho: -No creo que por tus tierras el nombre de Doctor Ceylhan fuera conocido, pero cuando abro en canal a mis víctimas quién extirpa sus órganos es el mismo hijo de ese hombre tan conocido como galeno en sus tierras... *Se retira para apoyar su espalda en el respaldo de la silla y saca de su chaleco una bolsita con hierbas y un fino papel donde las coloca.
-Ceylhan...- *no contaba con eso pero por otro lado ahora no podía dejar escapar esa oportunidad-Hasta el mayor de los arquitectos necesita de ayudantes para construir las más altas torres. Ponedme a prueba, si no os convenzo podéis quedaros con mis propios órganos.- ahora si que pondría todo su empeño en entrar en el grupo de Octav. Podría aprender mucho de él que era en realidad el motivo por el cual quería entra en ese mundo y no por dinero.
*Señala a Sihir: -Lo ves? fíjate bien en él porque es el mismo hombre que te hará sufrir, el mismo que te hará desear tanto la muerte que oleré tu pútrido olor antes de que te des cuenta de que estás repartido en tinajas... *Set levanta la cabeza dejando colgar la lengua sobre sus dientes por culpa de la respiración canina.
* Miika_Korppi se había lanzado al vacío en aquella empresa, pasara lo que pasara no se echaría atrás. Tenía un carácter tranquilo, solitario, intentando mantenerse invisible, como buena saami, pero también se podía mantener firme como una roca en una tempestad de nieve. Miró a Sihir y esta vez sin ninguna sonrisa contestó - Que así sea pues, si miento. Pero si no, me enseñaréis lo que no sepa.
*Octav menea la cabeza, sabe que no trae buena suerte meter a una mujer entre esos negocios, eso fue lo que notó bajo la pechera y eso fue lo que se cayó, no quería descubrirla, sabía que era una buena baza si se sabían jugar las cartas a su debido tiempo: -¿Cuál es tu nombre.. mocoso? *Preguntó dando después el último trago de su copa de vino.
-Miika Ukko Häkkinen y el vuestro es Octav supongo- No sabía que era el mismo hijo de Ceylhan el que tenía delante hasta que el mismo se delató.- Para tener poca paciencia tardáis en darme un... "trato hecho" o rebanarme el cuello aquí mismo para deleite de vuestro...armario.- ahora si volvió a dedicar una sonrisa a Sihir, si se quedaba tendría problemas con aquella mole, pero quería parecer seguro de sí mismo.
-No me pagan por rebanarte el cuello, así que no pierdo mi tiempo si de ese tiempo puedo sacar algo bueno, un trato... o tus órganos.. Y mi nombre es Turco. *Se levanta de la mesa igual de rápido que Set le sigue, Sihir lo hace con movimientos lentos mirando a Miika_Korppi.
*Miika_Korppi se quedó en la silla mirando la pinta, como si no le importara perder sus órganos.- Pues por Turco os nombraré entonces. Esta noche volveré con mi instrumental. Espero encontraros aquí.- No dijo más, tampoco podía hacer más gala de prepotencia ante unos maestros de la tortura. Deseando que se marcharan para poder recobrar la compostura, bebió un largo trago con los ojos cerrados.
*Octav acaricia la cabeza de Set cuando se levanta al entrar alguien al establecimiento, pero no retira la vista de su vaso de vino que saborea chasqueando la lengua. Frente a él Sihir, que si que desvió su mirada hacia el nuevo visitante siguiéndolo hasta la barra, que segundos después volvió a mirar a su compañero de mesa. La capa de piel de leopardo colgada en la espalda de este inmenso hombre era algo llamativo en ese lugar.
* Miika_Korppi mientras espera, se gira para observar a la gente. Seguramente habría alguno de los tripulantes del Bella Nafil. Sin embargo no encontró a ninguno, mejor, si nadie sabía quién era evitaría preguntas incómodas. Por otra parte al grupo de Octav dedicó una mirada precavida, no le enfundaban confianza y creía saber quiénes eran. Aun así inclinó la cabeza a modo de saludo.
*Octav mira a esa persona que le saluda, no cree conocerla y de hacerlo, lo más seguro es que lo hubiera matado, le da un golpe a Sihir: -Quién es? *Le pregunta haciendo que su compañero se gire para comprobar que es la persona que él miraba antes, vuelve la vista hacia su capitán y responde: -Sasamagüe.. utoniwa güme. *Octav entrecierra los ojos dándole varias palmaditas a Set en el cuello que hacen que el animal se levante y camine hacia la persona que les saludo mordiéndo levemente sus pantalones y tirando de ellos hacia la mesa donde se encuentra su amo.
* Miika_Korppi se había vuelto a la barra para recoger la pinta cuando sintió que le tiraban del pantalón. Cuando vio al perro y que no pretendía hacer daño sonrió. Le gustaban, al fin y al cabo dependía de ellos para vivir en el frío ártico. Lo que no le gustó tanto era que lo llevaran a la mesa. Tenía que seguir el consejo del viejo Gustav, "que nadie sepa que existes".
-saludos, su perro..bueno, no sé qué quiere, espero no molestar. no pudo evitar inspeccionar la cicatriz y buscarle mil motivos y formas de cicatrización.
*Octav clava sus azules ojos en el interlocutor examinándolo, de igual modo lo hacía Sihir, que desde más cerca se podían distinguir los tatuajes de sus hombros. Octav se frotó la mejilla, percatándose de que examinaba su cicatriz: -¿Te gusta chico? *Sihir sigue con la mirada en el desconocido.
* Miika_Korppi bajó la mirada al perro, que era el único ser que no le daba miedo de aquella escena a pesar de los dientes que se le presumían. Simple curiosidad, me gustan las cicatrices *cerró los ojos, otra vez volvía a pronunciar un comentario poco acertado, levantó la vista y se topó con la imagen de Sihir, lo que hizo que expulsara el aire a trompicones. Por alguna razón terminaba en un problema en cuanto hablaba. Ahora pensaría que era un chico desviado. es decir...es por mi trabajo, intento curar a la gente y coso heridas, me fijé en la vuestra por esa razón.
*Octav chasquea la lengua y empuja una silla con su pie para que el desconocido se siente: -Seguramente que si te hiciera una podrías cosértela más rápido que yo mismo a ti. *Sihir le ofrece sentarse con un gesto de su mano que resulta lento, pero nada ofensivo: -Kala mapegu... *Dice mirando a Octav que le responde con una inquisitiva mirada como si lo que le dijo Sihir le hubiera ofendido. Set se coloca junto a su dueño.
*Miika_Korppi toma asiento dejando la pinta sobre la mesa. Se reclinó sobre el asiento, y pensó en sus posibilidades de sacar partido a aquella situación- Podéis estar seguro de eso señor, aunque espero no tener que demostrároslo, al menos en mi cuerpo.- no podía seguir mostrándose como un muchacho amedrantado, tenía que hacerse valer y quizá tuviera que cambiar algunas cosas en su forma de pensar.- Se a lo que se dedican. Ya estaba hecho, ahora solo restaba que le rebanaran el cuello o que escucharan sus palabras.
*Octav ríe suavemente, hasta esa risa suena grave, dedica unos segundos para mirar hacia otro lado y cuando borra de golpe su risita de su rostro clava de nuevo sus ojos en el interlocutor: -Y? ... más de medio puerto sabe a que me dedico... *Sihir esboza una amplia sonrisa dejando que sus blancos dientes contrasten con el extraño tono dorado de su piel, que no es un moreno clarito, pero tampoco oscuro.
-Pero ellos no os serían de utilidad como yo.- se había armado de valor para hablar de aquella forma y ahora le gustaba esa sensación. Se acercó para apoyarse sobre la mesa y así mirar directamente a Octav -Ahí si os puedo demostrar si soy veloz con la aguja y el tendón- volvió el rostro hacia el inmenso Sihir y sonrió de medio lado. Le costaba meterse en eso, pero sería la mejor manera que tendría para aprender.
*Octav enarca una ceja y agarra al muchacho por la pechera y lo acerca a él en un golpe seco, huele a mar. A pesar de notar algo extraño, se lo calla, quizá pueda jugar esa baza en otra ocasión: -No juegues conmigo porque soy un hombre de poca paciencia.. *Le susurra a medio palmo de su cara soltándolo de golpe esperando a ver que le ofrece.
* Miika_Korppi toma aire intentando que no sea de una forma alterada. Aun tiene el salitre de Octav colapsando su olfato. Vuelve a colocarse bien y toma de la pinta, más por tranquilizarse que por sed- De donde yo vengo, la paciencia es un arte a cultivar, pero me he dado cuenta de que aquí no se usa demasiado. No os defraudaré. Estoy seguro de que tendréis algún carnicero que os haga el trabajo, pero perdéis mucha mercancía. Mis métodos no son tan chapuceros y ganaríais más dinero. Unos órganos en buen estado es lo que se pide...- hablaba por deducción, no conocía a nadie que curara de forma decente. Si traficaban con órganos serían cuatro carniceros que poco sabrían de mantener en buen estado un órgano.
*Octav entrecierra los ojos y decide pronunciarse volviendo a acercarse al muchacho: -No creo que por tus tierras el nombre de Doctor Ceylhan fuera conocido, pero cuando abro en canal a mis víctimas quién extirpa sus órganos es el mismo hijo de ese hombre tan conocido como galeno en sus tierras... *Se retira para apoyar su espalda en el respaldo de la silla y saca de su chaleco una bolsita con hierbas y un fino papel donde las coloca.
-Ceylhan...- *no contaba con eso pero por otro lado ahora no podía dejar escapar esa oportunidad-Hasta el mayor de los arquitectos necesita de ayudantes para construir las más altas torres. Ponedme a prueba, si no os convenzo podéis quedaros con mis propios órganos.- ahora si que pondría todo su empeño en entrar en el grupo de Octav. Podría aprender mucho de él que era en realidad el motivo por el cual quería entra en ese mundo y no por dinero.
*Señala a Sihir: -Lo ves? fíjate bien en él porque es el mismo hombre que te hará sufrir, el mismo que te hará desear tanto la muerte que oleré tu pútrido olor antes de que te des cuenta de que estás repartido en tinajas... *Set levanta la cabeza dejando colgar la lengua sobre sus dientes por culpa de la respiración canina.
* Miika_Korppi se había lanzado al vacío en aquella empresa, pasara lo que pasara no se echaría atrás. Tenía un carácter tranquilo, solitario, intentando mantenerse invisible, como buena saami, pero también se podía mantener firme como una roca en una tempestad de nieve. Miró a Sihir y esta vez sin ninguna sonrisa contestó - Que así sea pues, si miento. Pero si no, me enseñaréis lo que no sepa.
*Octav menea la cabeza, sabe que no trae buena suerte meter a una mujer entre esos negocios, eso fue lo que notó bajo la pechera y eso fue lo que se cayó, no quería descubrirla, sabía que era una buena baza si se sabían jugar las cartas a su debido tiempo: -¿Cuál es tu nombre.. mocoso? *Preguntó dando después el último trago de su copa de vino.
-Miika Ukko Häkkinen y el vuestro es Octav supongo- No sabía que era el mismo hijo de Ceylhan el que tenía delante hasta que el mismo se delató.- Para tener poca paciencia tardáis en darme un... "trato hecho" o rebanarme el cuello aquí mismo para deleite de vuestro...armario.- ahora si volvió a dedicar una sonrisa a Sihir, si se quedaba tendría problemas con aquella mole, pero quería parecer seguro de sí mismo.
-No me pagan por rebanarte el cuello, así que no pierdo mi tiempo si de ese tiempo puedo sacar algo bueno, un trato... o tus órganos.. Y mi nombre es Turco. *Se levanta de la mesa igual de rápido que Set le sigue, Sihir lo hace con movimientos lentos mirando a Miika_Korppi.
*Miika_Korppi se quedó en la silla mirando la pinta, como si no le importara perder sus órganos.- Pues por Turco os nombraré entonces. Esta noche volveré con mi instrumental. Espero encontraros aquí.- No dijo más, tampoco podía hacer más gala de prepotencia ante unos maestros de la tortura. Deseando que se marcharan para poder recobrar la compostura, bebió un largo trago con los ojos cerrados.
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